Un sabio tenía la costumbre de caminar por la playa antes de comenzar su trabajo. Un día, observó a un joven que se agachaba para recoger algo y suavemente lanzarlo al mar.
Al acercarse lo saludó:
– “Buenos días joven, ¿Qué estás haciendo?”
El joven hizo una pausa, se dio la vuelta y respondió:
– “Arrojo estrellas de mar al océano, señor”.
–” ¿Por qué arrojas estrellas de mar al océano?”, dijo el sabio. Lee el resto de esta entrada »